Entre toda la basura que se genera en México, los pañales desechablesrepresentan entre el 5 y el 11%. Aunque su principal componente es la celulosa, los pañales cuentan con otros materiales que complican su degradación; dependiendo del caso, toma de 100 y hasta 300 años.
Considerando este grave problema, Rosa María Espinosa Valdemar — investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Azcapotzalco (UAM-A) — ha creado una tecnología capaz de degradar los materiales de los pañales desechables a partir del cultivo de setas de la especie Pleurotus ostreatus, según informa el suplemento Investigación y Desarrollo.
El proyecto titulado Alternativas de tratamiento de pañales desechables propone degradar los pañales desechables con residuos líquidos, por medio de cultivo de setas. Esto ayudaría a separar los materiales y darles una nueva vida en otras aplicaciones.
Considerando que las setas se alimentan de celulosa, y que es el principal material de los pañales, se diseñó un procedimiento para aprovechar al máximo este elemento.
- El primer paso es obtener los pañales, sólo residuos líquidos.
- Se esterilizan por medio de autoclave, o calor a presión.
- Después se desmenuzan y muelen para formar sustrato.
- Se mezcla con lignina, nutriente que necesitan las setas.
- Así queda lista la base para cultivar los hongos.
El procedimiento se completa al reproducir las esporas del hongo y colocarlas en las camas de cultivo, de lo cual Espinosa Valdemar cuenta:
Tenemos que reproducir al hongo y obtener lo que comercialmente llamamos semillas, que es el crecimiento de las esporas del hongo sobre alguna semilla de trigo o sorgo. El producto obtenido se esparce sobre el sustrato (contenido en bolsa de plástico) y se mantiene de dos a tres semanas en la oscuridad con humedad y temperatura controladas, para luego exponerlos a una fase luminosa.
Con esta tecnología, un pañal desechable se degrada en sólo 2.5 a 3 meses y su volumen se reduce hasta en un 80%. Por cada kilo de pañales, sólo quedarán 200 gramos de residuos, obteniendo 300 gramos de setas.
En su fase de experimento, las setas nunca han salido del laboratorio y tampoco se espera destinarlas al consumo humano — aunque el equipo de investigación decidió probarlas.
Estábamos seguros de que no contenían sustancias contaminantes ni microorganismos infecciosos, ya que realizamos un análisis y encontramos que su contenido de proteína, grasa, vitaminas y minerales es igual que el de los hongos comerciales. No tendrían por qué se diferentes, sobre todo porque los pañales se esterilizan.
Los materiales que resultan de este proceso podrían tener distintas aplicaciones. Por ejemplo: Las setas podrían usarse como complemento para alimentar ganado; el gel que contiene los líquidos podría aplicarse en suelas de baja humedad; y, el plástico se podría enviar a reciclaje.
De nuevo el reino fungi nos ayuda a rescatar materiales que podemos reutilizar. Recordemos el caso de los celulares y el método de extracción de oro utilizando hongos.
Una gran tecnología, desarrollada por talento mexicano, que nos ayudaría a aprovechar los pañales desechables.